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Cuatro espinitas tiene mi cama

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ME. kynzgerl
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SOURCE. BLOGGER BLOGSKINS IMAGESHACK

jueves, octubre 30, 2003
0:24



UN BUEN BAÑO





Cierro la puerta y abro el grifo. Mientras el agua corre me miro en el espejo, fumo, dejo la toalla bien doblada encima del bidé, busco un CD de Zhigniew Preisner y lo pongo. Los azulejos ya están empañandos. Me desnudo lentamente y contemplo la balsa que tengo delante de mí. Meto la mano y si la temperatura es la que me gusta, casi hirviendo, me meto sin pensarlo y me quedo de pie, quieto unos instantes, como un flamenco con calcetines.
Entonces me sumerjo. Cuando el agua vuelve a estar en calma, observo todos mis óganos perfilados por burbujitas, con esa luz verdosa que parece salir de dentro de la bañera. Ese verde que solo tiene el cristal grueso del que estan hechas algunas botellas antiguas.
Me estiro, me doy la vuelta y de repente meto la cabeza y escucho. Todo suena hueco y tranquilo, como si estuvieras dentro del traje de un asrtonauta flotando por el espacio.
El tiempo me coge de las manos y me da vueltas hasta perder el sentido.
Salgo al exterior y me doy cuenta de que tengo los dedos arrugados como cuando cocinas frutas en vino dulce para un día de fiesta.
Noto que el agua está tibia, quito el tapón, cierro los ojos y mientras el nivel del agua va bajando pienso en cosas bonitas, como en pasear contigo por Barcelona una noche de lluvía y en que nos salgan pompas de jabón por las orejas.