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Cuatro espinitas tiene mi cama

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ME. kynzgerl
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SOURCE. BLOGGER BLOGSKINS IMAGESHACK

miércoles, septiembre 28, 2005
17:57



GRAND WHEEL





Le había prometido volver al parque si se portaba bien con su madre al empezar el nuevo curso.
Este verano lo había pasado con él. Mañanas dulces de juegos en el lago y tardes tranquilas de siestas y té helado. Fué como volver a cuando tenía cinco años. Donde no tenía que planear nada con antelación, donde sólo existían el aquí y el ahora.
La casa seguía siendo la piedra angular de las vacaciones. Cada día con más achaques y con más ruidos, pero con el mismo olor a sal y la misma sensación de tranquilidad que entonces. Un pedacito de paz ,como cuando su abuela descalza, con un vaso de limonada en la mano, miraba por la ventana como se ponía el sol entre las dunas.
Pero todo eso se había acabado. Ahora, desde la parte más alta de la montaña rusa de Connie Island, agarrando la mano de su hijo con la misma fuerza con la que se sostiene el ticket de la carnicería, pensó por primera vez en el suicidio.
Y mirando la ciudad a lo lejos, tuvo la seguridad de que no pasaría mucho tiempo.